domingo, 11 de marzo de 2012

Las estepas y roquedos necesitan más protección

Fondo Natural solicita al Gobierno de Aragón, Ministerio de Defensa y a los ayuntamientos de Zaragoza, Utebo y Torres de Berrellén, que incrementen durante los próximos meses la vigilancia en los accesos a la parte superior del escarpe entre Juslibol y Torres de Berrellen (límite del campo de maniobras de San Gregorio).

Las estepas y escarpes del valle del Ebro son uno de los ecosistemas más representativos y amenazados de Aragón. En demasiadas ocasiones el desconocimiento y poca escasa valoración de los recursos ambientales y culturales que encierra han servido de excusa para permitir su degradación y destrucción progresiva: instalación de vertederos, polígonos industriales y urbanizaciones, minas, nuevos regadíos, plantaciones de pinos... También pasa desapercibido el impacto que otras actividades de ocio o esparcimiento, aparentemente menos agresivas, pueden tener sobre el propio paisaje y la flora y fauna silvestre.

Sin embargo el tránsito de vehículos todoterreno, motos, bicicletas e incluso caminantes en las proximidades de los acantilados ya ha afectado gravemente a muchas zonas, con grave erosión y desaparición de especies amenazadas, además de proliferar basureros incontrolados que degradan el paisaje, contaminan el agua de barrancos o balsas temporales y suponen un posible foco de incendios.




Precisamente para tratar este asunto, en una reunión celebrada el pasado jueves en Zaragoza entre varias organizaciones ambientales y un foro o plataforma constituida para fomentar el acceso libre al monte del Castellar, Fondo Natural expuso su grave preocupación y rechazo a algunas de las propuestas planteadas por el riesgo que supondría incrementar el tránsito por el escarpe y estepas (actualmente prohibido), haciendo un llamamiento a usuarios y ayuntamientos para extremar las precauciones, impedir la proliferación de vertederos, construcciones ilegales, expolio de yacimientos arqueológicos, etc.  Así, antes de iniciar la señalización y promoción de este uso público, debería iniciarse un estudio de los recursos para evaluar su estado y amenazas, estableciendo medidas efectivas que garanticen su conservación, incluso la posibilidad de declarar una Reserva Natural en el limite meridional del campo de maniobras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario